El OIEA indicó que los trabajadores consiguieron detener la filtración localizada en la unidad 2 de la central nuclear.
La grieta, que había sido descubierta el sábado pasado, fue sellada con una inyección de silicato de sodio, un polímero soluble que al endurecerse bloqueó la salida del líquido contaminado.
La mayor preocupación para las poblaciones de los alrededores de la planta sigue siendo el nivel de contaminación detectado en el agua y el aire.
Publicado orginalmente en https://news.un.org/feed/view/es/story/2011/04/1214601