Los violentos altercados sucedieron tras la aprobación de un proyecto de reforma de la Constitución que permitiría la reelección del presidente del país, Horacio Cartes.
Amerigo Incalcaterra hizo un llamado a los líderes políticos a no incitar a la violencia y a buscar la senda del diálogo.
Asimismo, llamó a las autoridades a garantizar la libertad de expresión y manifestación y les instó a garantizar el Estado de Derecho, requisito ”crucial para el funcionamiento de la democracia y para garantizar los derechos humanos”.
Según fuentes de prensa, la protesta finalizó con un muerto y varios heridos.
Publicado orginalmente en https://news.un.org/feed/view/es/story/2017/04/1376391